El mundo está tratando de superar una pandemia que ya alcanza más de un millón de infectados, según la Organización Mundial de la Salud. En una oleada de información constante y en plena cuarentena, las noticias falsas están a la orden del día. Las redes sociales se prestan para la viralización de estas. ¿Por qué WhatsApp restringió el reenvío de mensajes?
El martes 7 de abril, WhatsApp anunció que establecería nuevos límites en el reenvío de mensajes identificados como "altamente reenviados", es decir, enviados por una cadena de cinco o más personas. Estos mensajes ahora solo se podrán reenviar a una sola persona.
Los expertos en tecnología han acogido con beneplácito la decisión de WhatsApp de lanzar una nueva función para restringir la libertad de reenviar mensajes, en un intento por acabar con una nueva crisis de noticias falsas que rodea la pandemia del COVID-19.
De hecho, en su propio blog , WhatsApp argumentó que: “El año pasado presentamos a los usuarios el concepto de mensajes que se han enviado muchas veces. Estos mensajes están etiquetados con flechas dobles para indicar que no se originaron de un contacto cercano. En efecto, estos mensajes son menos personales en comparación con los mensajes típicos enviados en WhatsApp. Ahora estamos introduciendo un límite para que estos mensajes solo se puedan reenviar a un chat a la vez ".
Limitación por el COVID-19
Esta restricción podría justificarse, por un lado, como una medida para frenar la difusión de noticias falsas durante una emergencia de salud global. Por otro lado, también podría verse como otra transformación de la práctica original de las redes sociales.
Uno podría objetar que WhatsApp no es un ejemplo de redes sociales; sin embargo, como subraya la propia empresa, su función socio-pública es innegable. En las últimas semanas de pandemia, las personas también han utilizado el servicio de mensajería para organizar momentos públicos de apoyo a los trabajadores de la salud que curan a los infectados por el virus COVID19.
Estar en línea es la nueva condición universal de ser humano, inmerso mental y emocionalmente en una realidad hiperconectada donde el tiempo deja de ser lineal, las distancias espaciales se aniquilan y los bytes entregan vidas enteras a menos que la latencia les impida hacerlo.
En otras palabras, la pandemia y las redes sociales son epidémicamente contagiosas; el primero afecta nuestra salud, el segundo nuestra comunicación. Ignoran las diferencias entre las personas y las decisiones de los Estados Nacionales. La comunidad de Facebook es el grupo de personas más grande y único en la historia de la humanidad y abarca países, religiones y todas las demás diferencias culturales.
